Mantente puro 

Introducción 

PURO 

El significado de la palabra puro es limpio o casto. En el libro de 1 Timoteo, Pablo le escribe a Timoteo, que tiene unos 30 años. Según la cultura judía, Timoteo todavía es considerado un hombre joven. Se le dio una gran responsabilidad como líder de la iglesia. En 1 Timoteo 4:12, Pablo le dijo que fuera un ejemplo del creyente en muchas áreas, incluida la pureza. 

Al comienzo de este mismo libro de la Biblia, Pablo escribió en 1 Timoteo 1:5: “porque la consumación del mandamiento es el amor, que procede de un corazón puro, de una buena conciencia y de fe verdadera”. Los judíos conocían las leyes morales y civiles que Dios le había dado a Israel para separarlos del mundo. Dios ordenó a su pueblo “Sed santos; porque yo soy santo.” 

Esto también se entiende y aplicarse al creyente del Nuevo Testamento según 2 Pedro 1:16. Dios nos llama a salir de este mundo malvado y nos ordena que seamos limpios, puros y castos. Pero debemos reconocer que la pureza comienza en nuestro corazón. Es una decisión que debemos tomar. 

Los judíos estaban físicamente limpios ritualmente por fuera, pero estaban muertos e impuros en sus corazones espiritualmente. Jesús dijo: “Este pueblo de labios me honra; Mas su corazón está lejos de mí. No es lo que entra en la boca lo que contamina al hombre; sino lo que sale de la boca, esto contamina al hombre. Pero lo que sale de la boca, del corazón sale; y esto contamina al hombre.”. (Mateo 15:8,11,18) 

La pureza comienza en el corazón y la mente. El exterior refleja lo que hay en el interior. Pero el interior no cambia desde el exterior. Tendremos palabras limpias y un estilo de vida pura cuando nuestro corazón esté en paz con Dios. Cuando pensamos bien, actuaremos bien. Nuestro comportamiento reflejará nuestras creencias. 

Por eso Pablo le dijo a Timoteo que fuera puro en doctrina, que evitara los falsos maestros y huyera de las concupiscencias juveniles. En este pasaje él instruye sobre muchos temas importantes, que pueden resumirse en este simple mandamiento: Mantente puro. 

Sólo Tú 

Ser puro es una decisión individual. Dios te ordena que seas puro. La autoridad en tu vida establecerá reglas para que seas puro. Otros te animarán a ser puro. Pero debes desear personalmente ser puro. ¡No ores por un esposo o esposa casto (a) si no estás dispuesto a mantenerte puro! 

No puedes controlar lo que hacen los demás, pero puedes determinar que serás como Cristo. Puedes honrar a Dios en tu vida, vivir puro y decir “No” a la tentación. No tienes que seguir los caminos del mundo. No importa lo que hagan los demás, ¡mantente puro! 

Mantener 

“Mantener” significa vigilar, proteger (de pérdidas o lesiones) manteniendo la vista sobre [algo]; retener (para fines personales; permanecer soltero) 

¿Quieres que Dios escriba una hermosa historia de amor para ti? Tendrás que mantenerte puro. Tendrás que protegerte deliberadamente de aquellos que querrán robarte la virginidad. Guarda tus ojos. Guarda tu corazón... protégelo para con quién te casarás. En el altar cuando se unan en matrimonios, sé capaz de entregarle todo tu corazón, no sólo una parte. ¡Qué regalo tan precioso e invaluable para darle a tu cónyuge... un corazón, una mente y un cuerpo puro que has guardado solo para él (ella)! Pero debes obedecer este simple mandamiento: “¡Mantente puro!” 

Mientras hablaban sobre este tema en una reunión de jóvenes, los adolescentes hicieron una obra que ilustraba la importancia de la pureza antes del matrimonio. Se estaba llevando a cabo una ceremonia de matrimonio. Cuando la novia avanzaba por el pasillo, miró a su novio con una gran sonrisa. Pero él la miró entusiasmado. La seguían otros cinco jóvenes, algunos de los cuales él conocía. Él le preguntó por qué ellos té siguen. Tenía que admitir que ya había tenido relaciones con estos otros chicos en el pasado. Todos eran sus "ex novios". Ahora estás sombras irían con ella a su matrimonio, las cicatrices emocionales y los recuerdos de estas relaciones rotas del pasado. 

¡Así no es como Dios diseñó nuestra vida! Siga leyendo para ser desafiado y alentado por una mejor manera de llegar al altar matrimonial: ¡a la manera de Dios! 

Una nota de aliento 

Quizás no te hayas mantenido puro en el pasado. ¡Tengo buenas noticias para ti! Dios puede limpiar y restaurar los vasos sucios y rotos. Este libro no sólo te animará a mantenerte puro (a) sino también te mostrará cómo puedes volver a ser limpio, ser puro en tu futuro relaciones de parejas. Dios quiere sanar el pasado, darte paz hoy y esperanza para mañana. 

Este libro es para todos, jóvenes y mayores, solteros y casados, cristianos e incrédulos. Todos deseamos ser amados y aceptados. Cada uno tiene una historia, pero lo más importante es que cada uno tiene una historia que Dios quiere escribir. Lea y descubra respuestas bíblicas para los aspectos más desafiantes de cualquier relación. 

Esperanza para los desconsolados 

Quizás hayas leído hasta aquí y sientas que no hay manera de que Dios pueda escribir una hermosa historia de amor para ti. Sientes dolor y arrepentimiento por decisiones pasadas que te han dejado cicatrices emocionales e incluso físicas. Quizás sientas que tus decisiones no te dejan ninguna posibilidad de un futuro feliz. Es posible que otros se hayan aprovechado de ti y te hayan dejado con el corazón herido. ¡Parece que no puedes seguir adelante! Aunque el pasado no se puede cambiar y las consecuencias del pecado son reales, todavía hay esperanza para ti. El perdón está disponible y el dolor puede curarse. 

¿Qué se puede hacer? 

Cuando Esdras llegó a Jerusalén, encontró algo que le causó gran tristeza. Muchos judíos que ya habían regresado del cautiverio babilónico estaban quebrantando perversamente la ley de Dios al casarse con mujeres a quienes les estaba prohibido. Esdras permitió que el pueblo experimentara un avivamiento nacional mientras oraban y confesaban su pecado. Uno de los hombres llamado Sacanías dijo las siguientes palabras en Esdras 10:2: “. . . Nosotros hemos pecado contra nuestro Dios, pues tomamos mujeres extranjeras de los pueblos de la tierra; más a pesar de esto, aún hay esperanza para Israel”.  

En el versículo 11, Esdras le dice a todo el pueblo reunido lo que deberían hacer: “Ahora, pues, dad gloria a Jehová Dios de vuestros padres, y haced su voluntad, y apartaos de los pueblos de las tierras, y de las mujeres extranjeras”. El pecado siempre es devastador y conduce a la destrucción. Pero Dios es el libertador que puede marcar la diferencia. Hay esperanza para cada uno de nosotros cuando confesamos nuestro pecado a Dios. Él ve lo que hemos hecho y no va a perdonar nuestro pecado si lo ignoramos. Él no puede sanarnos si seguimos ocultando nuestras heridas. No sólo debemos confesar nuestro pecado, pero también debemos separarnos de él. El verdadero arrepentimiento del pecado conducirá a su eliminación. La respuesta del pueblo en los días de Esdras fue unánime en el v.12: ". . . Así se haga conforme a tu palabra". Prestaron atención a las palabras de Esdras y se volvieron a Dios. 

Pillado en el acto 

Consideremos ahora la siguiente historia de Juan 8. Leemos sobre el relato de una mujer que fue sorprendida en acto mismo del adulterio. Qué vergüenza debió haber sentido. ¡Fueron los líderes religiosos judíos quienes la llevaron a Jesús! Ella estaba mirando al Hijo de Dios puro y sin pecado... ¿qué podía hacer o decir? Era impura en una marginada sociedad. La ley exigía que fuera apedreada hasta la muerte. Estaba desesperada y se sentía inservible. Jesús miró a los escribas y fariseos y dijo: “. . . El que de vosotros esté sin pecado sea el primero en arrojar una piedra contra ella”. Juan 8:7. 

La Biblia nos dice que “Pero ellos, al oír esto, acusados por su conciencia, se fueron uno a uno, . . . y quedó solo Jesús, y la mujer que estaba en medio". ¡En lugar de condenar a la mujer, Jesús le mostró misericordia! Jesús le dijo: "vete, y no peques más". ¡Jesús la confrontó con la verdad que la haría libre! 

La verdad es que todos hemos pecado contra un Dios santo. Muchos parecen justos debido a su religión, pero a los ojos de Dios nuestra bondad es como trapos de inmundicia. El ciudadano respetuoso de la ley se siente lo suficientemente bueno, o al menos mejor que su vecino. Pero Dios ve nuestros corazones malvados y nuestros pensamientos egoístas. Todos somos impuros e imperfectos en nuestro pecado. Todos somos culpables de violar las leyes de Dios. 

Pero Dios ofrece gracia a los humildes. Como esta mujer, podemos arrepentirnos de nuestro camino pecaminoso y recibir gracia por la fe en Jesucristo. También nosotros podemos ser libres de toda conciencia de culpabilidad y recibir misericordia. Podemos cambiar nuestra vergüenza permitiendo que Jesús en su justicia lo cambie por honra. 

Él vino a morir por nuestro pecado y resucitó. A través de su sangre pura que él derramó, podemos ser perdonados. 

Perdonado mucho 

En Lucas 7, Jesús está en la casa de un fariseo cuando una mujer que tenía mala reputación por su pecado vino a Jesús. Se arrodilló ante Jesús y lloró. Lavó los pies de Jesús con sus lágrimas y sus cabellos. El fariseo se sintió ofendido por haber dejado que una mujer malvada lo tocara. Jesús notó que este religioso ni siquiera le había ofrecido agua para lavarle los pies, como era costumbre en la época. Pero la mujer había sacrificado su propio perfume caro para lavarle los pies. En el versículo 37, Jesús dijo: “Por lo cual te digo que sus muchos pecados le son perdonados, porque amó mucho; más aquel a quien se le perdona poco, poco ama". Entonces Jesús le dijo a la mujer: "Tus pecados te son perdonados”. 

En Lucas 8:1,2, se señala a María Magdalena como una de las mujeres que ministraban a Cristo. Había estado poseída por demonios y era una vergüenza. Ella estaba lejos de ser pura en su pasado, sin embargo, Jesús pasó por su camino y la libró de las tinieblas. Ella fue transformada y hecha una nueva criatura. Ella fue una devota seguidora de Cristo durante todo su ministerio terrenal. De hecho, la primera persona con la que Jesús habló después de su resurrección fue esta señora redimida. En Marcos 16:7, Jesús le dijo a María que fuera a decirles a los otros discípulos que Él estaba vivo. 

Lidiando con el pasado 

Aquí tienes las buenas noticias. Quizás tu pasado sea oscuro y vergonzoso. Quizás hayas tomado algunas malas decisiones. Sabes que no hay nada puro y hermoso en tu pasado. Satanás puede usar esto para desanimarte y quiere mantenerte derrotado. No permitas que el pecado pasado obstaculice tus futuras bendiciones en Cristo. 

Confiesa tu pecado a Cristo. Recibe su amor y perdón. Si nunca has recibido el don de la salvación en Cristo, hoy Él quiere que vengas a Él. Después de todo, vino a salvar a los pecadores. Son los enfermos los que necesitan un médico. 2 Corintios 5:17 dice: “De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas”. 

Si eres cristiano y te sientes agotado por fracasos pasados, recuerda que “abogado tenemos para con el Padre, a Jesucristo el justo”. (1 Juan 2:1) Satanás es un acusador de los hijos de Dios. Pero nuestro Abogado tiene la capacidad de liberarnos. La prueba está en sus manos y pies llenos de cicatrices. Él murió por nuestros pecados y los alejó como está el oriente del occidente. ¡Dios ya no se acuerda de ellos! Jesús pagó nuestra deuda de pecado y agradó al Padre con la ofrenda de Su sangre sin pecado a favor de nuestra maldad. “Mas a Dios gracias, el cual nos lleva siempre en triunfo en Cristo Jesús . . .” (2 Corintios 2:14) 

Cuidado con los fariseos 

Quizás usted sea como los líderes religiosos moralistas. Miras con desprecio a aquellos que no son tan buenos como tú. Te enorgulleces de tu pureza física. Quizás nunca hayas estado en una relación inmoral. Has podido evitar las tentaciones físicas. Pero es posible que aún estés contaminado en tu mente y en tu corazón. ¿Cómo están tus pensamiento? ¿Qué hay en tu corazón? ¿Te inclinas a mirar pornografía? Tenga cuidado de menospreciar el hecho de que puede ser impuro en su mente. Confiesa tu pecado y sé perdonado. No seáis como los líderes religiosos judíos que eran limpios por fuera, pero malvados en su corazón. 

Todos debemos recordar que sólo hay uno que nunca ha pecado. Dios mismo. Cuando Dios se hizo carne como Jesucristo, nació sin pecado. ¡Él es perfecto y puro! Él es el único que tiene derecho a juzgar nuestro pecado. ¡Pero también tiene derecho a tener misericordia y perdonarnos! Él quiere que nos arrepintamos y pongamos nuestra fe sólo en él. 

Culpa y gracia 

El apóstol Pablo, que anteriormente mataba cristianos, se llamaba a sí mismo el “primero de los pecadores”. Él escribió en Filipenses 3:13,14:   . . . pero una cosa hago: olvidando ciertamente lo que queda atrás, y extendiéndome a lo que está delante, prosigo a la meta, al premio del supremo llamamiento de Dios en Cristo Jesús". 

Si no ha recibido el don de la vida eterna, puede encontrar el perdón sólo en Cristo. Si has nacido de nuevo y eres hijo de Dios, es posible que encuentres limpieza de tu pecado. Como necesitamos bañar nuestro cuerpo regularmente con agua y jabón, debemos seguir manteniendo limpios nuestra mente y nuestro corazón. Leer y obedecer la Palabra de Dios. Confiesa y abandona tu pecado. Es posible que hayas roto tu corazón y el de otros por decisiones egoístas en el pasado. Pero ahora es el momento de empezar de nuevo por la gracia de Dios. Romanos 5:20 dice: “...pero donde abundó el pecado, sobreabundó la gracia”. No importa lo que hayas hecho en el pasado, el poder de Dios es mayor. Él puede superar tu culpa con Su gracia. ¡Mira hacia adelante con esperanza y seguridad de que Dios todavía tiene un gran plan para tu vida! 

Abordar el abuso 

Por último, me gustaría dirigirme a aquellos de ustedes que puedan haber sido abusados física o sexualmente. Hay muchos que viven con sentimientos de culpa y vergüenza porque alguien más se aprovechó de ellos. Esto es lamentable, porque la víctima no debería sentir el peso del pecado del perpetrador. El inocente no debe cargar con la culpa del opresor. En este caso, es vital que el que fue maltratado llegue al lugar donde pueda encontrar su sanidad en Cristo y perdón para el agresor. Déjame dejarte con este pensamiento. Jesús fue desnudado, inocentemente colgado de un árbol, siendo convertido en maldición mientras cargaba con el pecado de la humanidad. Fue afligido y abusado, todavía así mantuvo su inocencia. Jesús no fue menos puro en la cruz que cuando era un bebé en el pesebre. 

Si eres hijo de Dios, estás revestido de la justicia de Cristo. Recuerda que siempre eres aceptado, amado, redimido y liberado. No tendrás que preocuparte por las mentiras que Satanás inventa para tratar de desanimarte y deprimirte. ¡El hijo de Dios está sentado con Cristo en lugares celestiales! 

Directrices Para Los Piadosos 

Que hacer mientras se case, es necesario tener algunos principios que te van a ayudar con la responsabilidad que vas a seguir. ¡A continuación van a leer algunos principios que recomiendo especialmente para aquellos que están pensando en casarse! 

1. Servir al Señor apasionadamente. 

"En lo que requiere diligencia, no perezosos; fervientes en espíritu, sirviendo al Señor;" Romanos 12:11 

Sea apasionado por Dios. Establece hábitos de principios bíblicos en tu juventud. Lea, estudie y memorice las Escrituras. Escriba la Palabra de Dios, ore, testifique, dé y sea fiel al servir en su iglesia local. Te atraerá alguien que sea como tú. No espere que su futura pareja sea quien usted no está dispuesto a ser. Centra tu atención en las cosas del Espíritu de Dios. 

2. No invites a la tentación. 

"ni deis lugar al diablo." Efesios 4:27

Evite momentos de tentación como el contacto físico: ¡mantengan las manos alejadas uno del otro! Según cuenta la vieja historia, un hombre iba a conducir un coche por una peligrosa carretera de montaña. El propietario del automóvil preguntó qué tan cerca podía conducir el vehículo con seguridad cerca del borde de la carretera. El joven sabio respondió: “No lo sé. ¡Me quedo lo más lejos posible del borde! 

No juegues con la tentación. ¡Tu carne es más débil de lo que crees! Recuerdo un novio que tuvo mi cuñada una vez. 

Él era un joven agradable, pero comenzó a presionarla para que comenzara a tomarle la mano. Ella había deseado tener la “Manos fuera de su relación” hasta que se casara. Entonces cuando su novio le dijo: “Si me amas, me tomarás de la mano”, ella respondió: “Si realmente me amas, me respetarás y honrarás mi deseo de esperar hasta que nos casemos para tener una relación física”. Ella rompió esa relación y unos años después Dios la bendijo con un maravilloso caballero que honró a Dios y a ella. Están felizmente casados hasta el día de hoy. 

3. Trata a los demás como a tu hermano o hermana. 

"No reprendas al anciano, sino exhórtale como a padre; a los más jóvenes, como a hermanos; a las ancianas, como a madres; a las jovencitas, como a hermanas, con toda pureza." 1 Timoteo 5:1-2 

Este es uno de los principios más prácticos que pueden aplicar los jóvenes que toman en serio mantenerse puros. ¿Cómo se debe tratar a las mujeres? Trata a las mujeres mayores con honor, como tratarías a tu propia madre. Trata a las mujeres más jóvenes como a tu propia hermana. ¿Y cómo haces eso? La Biblia dice: “...con toda pureza”. Respete y cuide su bienestar; no los busquéis para complacer vuestras concupiscencias carnales. Tengo cuatro hermanas. ¡Ni una sola vez quise tomarles la mano o besarlas! De hecho, en ocasiones cuando nos peleábamos, mis padres me decían que les dijera “lo siento” y les diera un abrazo. ¡Eso fue una tortura! A medida que crecí, mi amor por ellas se demostró al querer protegerlas de cualquier daño. Ésta es la manera pura y apropiada en que los hombres deben tratar a las mujeres. 

4. Mantener una reputación pura e intachable. 

"Absteneos de toda especie de mal." 1 Tesalonicenses 5:22 

No estar solo, creando así situaciones cuestionables. Pasa tiempo con grupos de amigos. Cuando mi esposa y yo estábamos cortejándonos, pasábamos tiempo visitándonos. Como vivíamos en diferentes pueblos, viajábamos mucho. 

Si alguna vez íbamos en el mismo auto, nos asegurábamos de que siempre hubiera una tercera persona que fuera nuestro acompañante. Decidí que nunca dormiría en la misma casa que ella. 

Un par de veces, Jamie pasó la noche en nuestra casa porque teníamos mucho trabajo que preparar para nuestra boda. Una de esas veces dormí en el auto. En otra ocasión fui al edificio de la iglesia a dormir. Era muy importante que mantuviéramos un testimonio irreprensible en el área de 

la pureza física. 

Me encanta la historia de Daniel. Como joven llevado cautivo por un reino idólatra, fue puesto en una situación muy comprometedora. Se le dijo que comiera la carne del rey y bebiera su vino. Esto era opuesto a la ley judía. La Biblia dice que Daniel “se propuso en su corazón no contaminarse”. Dios honró su compromiso con la pureza, sus tres amigos siguieron su ejemplo cuando se les ordenó inclinarse ante el ídolo que el rey Nabucodonosor había levantado. ¡No te comprometas! Una buena reputación no tiene precio. Proverbios 22:1 dice: "De más estima es el buen nombre que las muchas riquezas, Y la buena fama más que la plata y el oro." 

5. Huye y sigue. 

"Huye también de las pasiones juveniles, y sigue la justicia, la fe, el amor y la paz, con los que de corazón limpio invocan al Señor."
2 Timoteo 2:22. 

A lo largo de la Biblia, Dios nos da ejemplos que respaldan sus mandamientos. Nos dice lo qué no debemos hacer y cómo debemos vivir. Sabemos que debemos huir de las concupiscencias. Hay algunas batallas que no podemos pelear y ganar. No podemos luchar contra la tentación carnal de los deseos; debemos huir lo más rápido y lo más lejos posible. Pero también debemos correr en la dirección correcta. Esto significa que hay algunas personas compasivas en nuestra vida que nos guiarán por el camino de la justicia, la fe, la caridad y la paz. ¡Síguelos! 

No te irrites cuando alguien te advierte sobre otra persona. No te enojes cuando una persona benigna te señale un mal hábito o tu mal comportamiento. Esto es una gran verdad cuando se trata de la manera de vestir. Vista modestamente. Niñas, mantened vuestro cuerpo cubierto, y jóvenes, guardad vuestros ojos y vuestro corazón del mal. 

No es sólo la tentación que estás evitando al huir de las concupiscencias juveniles, sino lo que estás persiguiendo al seguir el ejemplo de los justos. ¿Qué ejemplos piadosos puedes seguir? Tu mente necesita estar pensando en un buen libro de lectura de hombres y mujeres piadosos. Un libro que realmente me ayudó mientras estaba en la universidad fue Shadow of the Almighty (Sombra del Todopoderoso) sobre Jim Elliot. Aprovechó cada oportunidad para desarrollar su mente y su corazón para ser un siervo útil de Jesucristo antes de casarse. 

6. Sepa en qué dirección se dirige. 

"¿Andarán dos juntos, si no estuvieren de acuerdo?" Amós 3:3 

Mientras vives en la voluntad de Dios, Él dirigirá tu camino para que se cruce con el camino de la pareja que Él tiene para ti. Lo comparo con un triángulo. Dios está arriba, tú estás abajo en una esquina y tu futuro cónyuge está en la tercera esquina. Mientras estés buscando a tu cónyuge, estarás descontento (a) y confundido (a). Pero si mantienes tus ojos fijos en Jesús y permaneces en Su Palabra, te acercarás más a él. En Su tiempo y a Su manera, Dios atraerá hacia sí a tu futura (o) pareja y, como resultado, unirá sus caminos. 

Considere los siguientes desafíos:

Joven, supongamos que te casaras este año. ¿Cómo apoyará y guiará a su esposa ? ¿Tiene un trabajo honesto y un ingreso adecuado? Ninguna mujer piadosa está orando por un marido perezoso al que pueda mantener económicamente. Sea un gran trabajador. Aprende un oficio. Tenga iniciativa y sea un líder piadoso ahora. Incrementa tus conocimientos en temas provechosos y desarrolla habilidades que beneficiarán tu futuro. Jovencita, supongamos que su boda es dentro de unos meses. 

Tienes una infinidad de detalles para preparar la boda perfecta. ¡Pero! ¿Estás lista para ser una mujer casada a cargo de un hogar? ¿Has aprendido a someterte a la autoridad? ¿Sabes cocinar, ahorrar dinero o coser ropa? Sea diligente en sus negocios y sea un siervo de Dios ahora.

7. Entrega tu corazón a las personas adecuadas. 

"Dame, hijo mío, tu corazón, Y miren tus ojos por mis caminos." Proverbios 23:26 

Todo lo que pensamos, hacemos y decimos comienza en nuestro corazón. El hombre interior determinará lo que hace el hombre exterior. ¡Tu corazón es invaluable! Entrega tu corazón ahora a quienes lo merecen: ¡A Dios, a tus padres y a tu cónyuge! ¡Tus padres deberían ser tus consejeros más cercanos, ya que ellos cuidan de tu alma! 

Esto es especialmente importante para las niñas. Las niñas necesitan seguridad. Deberían poder confiar en su padre. Recuerdo haber escuchado al Dr. S.M. Davis predicar sobre este tema. Contó que un día sus dos hijas le dieron un regalo envuelto. La abrió y había una cadena con dos llaves. Le preguntaron si sabía qué representaban las llaves. No tenía ni idea y respondió: "... ¿las llaves del reino?" Dijeron: "¡Papá, estas son las llaves de nuestro corazón!" Hasta que nos casarán, confiarían las decisiones más importantes a la supervisión y el liderazgo de su padre. No se involucrarían en una relación sin la aprobación y el consejo de su padre. 

El matrimonio de Isaac y Rebeca es una de las historias de amor más hermosas registradas en la Biblia. Isaac confió en su padre Abraham cuando envió a su sirviente a buscarle una esposa. Más importante aún, confió en Dios en el momento de traerle a su esposa. Dios orquestó las circunstancias perfectamente. Debemos confiar en el Señor y en el liderazgo piadoso para brindarnos la guía adecuada en el tema del matrimonio. 

8. No defraudes a los demás. 

"que ninguno agravie ni engañe en nada a su hermano; porque el Señor es vengador de todo esto, como ya os hemos dicho y testificado. Pues no nos ha llamado Dios a inmundicia, sino a santificación." 1 Tesalonicenses. 4:6,7 

La palabra defraudar significa aprovecharse. Sea amigable con intenciones honestas, pero evite coquetear. Muchos jóvenes se han aprovechado de los sentimientos de una joven. Decir dulces palabras, cortejarla y ganarse su corazón, sólo para su propio beneficio. El egoísmo y la lujuria impía están detrás de esta acción, no la santidad y la pureza. Dios nos llama a ser honestos y limpios. Asegúrese de tener las intenciones correctas antes de involucrarse en una relación. 

Antes de decirle a Jamie que estaba interesado en ella como algo más que una amiga, quería estar seguro de que nuestra relación conducía al matrimonio. El compromiso era necesario. Nos estábamos volviendo amigos cercanos y sabía que nuestra amistad se estaba volviendo seria. Un día en la escuela donde enseñaba iban a celebrar un banquete de San Valentín. Se sentía incómoda para invitarme, así que le preguntó a su papá qué hacer. Con la bendición de su padre, me preguntó si quería ir con ella. Dudé en responder y dije que lo pensaría. Aunque para ella era difícil tener que esperar mi respuesta, era importante que no la hiciera creer que estaba interesado sin hacer un compromiso a largo plazo con nuestra relación. 

Esa semana recibí consejo de la Palabra de Dios y de mi Papá. Para mí era importante estar seguro de que me iba a casar con Jamie antes de llevarla al banquete de San Valentín. Una semana después le di mi respuesta "Sí". No quería jugar con sus emociones y actuar interesado sin hacer el sacrificio de seguir adelante. De hecho, la noche del banquete de San Valentín me reuní en secreto con el padre de Jamie en un parque cerca de su casa antes de verla. Le conté a su Papá mis intenciones y que me gustaba su hija y creía que Dios nos estaba guiando a una relación seria que llevaría al matrimonio. Le pedí su bendición para iniciar un noviazgo con ella. Esa noche después del banquete, compartí con Jamie la conversación que había tenido con su padre y le dije mis verdaderos sentimientos... que me gustaba y quería iniciar un noviazgo con intención de casarme. 

9. Guarda tu corazón como propiedad de Dios. 

"Sobre toda cosa guardada, guarda tu corazón; Porque de él mana la vida." Proverbios 4:23 

Debes guardar y proteger tus pensamientos y deseos. Satanás quiere robar tu pureza, matar tu futuro matrimonio y destruir tu reputación. Tendrás que decidirte a luchar para mantener tu cuerpo puro. Guarda tu testimonio. Protege tu corazón diligentemente. 

Evite la práctica mundana de las citas. Esta es la relación cercana de dos personas que pueden o no tomarse en serio una relación comprometida. Es muy fácil apegarse emocionalmente a otra persona. Cuidado con entregar tu corazón a alguien antes de que sea el momento. En caso de duda, habla con tus padres o con tu pastor sobre los posibles candidatos antes de apegarte emocionalmente. Sería un sabio ejercicio hablar de las características que debes buscar en tu esposa (o) ya que esto es para toda la vida. Hasta que estés listo (a) para casarte, no invite a salir a alguien en especial sólo por pasar el rato, simplemente sea amigo de todos. 

Mi papá decía: "No le digas a una chica que la amas a menos que tengas un anillo de bodas para ponerle en el dedo". Este fue un consejo útil que seguí. De hecho, fue en el momento de nuestro compromiso, durante un viaje en canoa, que sorprendí a Jamie. Nos tomamos un descanso, salimos del barco y dimos un pequeño paseo. Me arrodillé y dibujé un corazón en la arena. La miré y dije las dos palabras más especiales por primera vez. "Te amo". Luego saqué el anillo de compromiso que estaba en mi bolsillo y le pedí que se casara conmigo. Afortunadamente ella me dijo ¡sí! 

10. Estar igualmente unidos. 

"No os unáis en yugo desigual con los incrédulos; porque ¿qué compañerismo tiene la justicia con la injusticia? ¿Y qué comunión la luz con las tinieblas?" 2 Corintios 6:14 

Note las palabras “unáis en yugo, compañerismo, y comunión”. ¡El matrimonio es compañía para el resto de tu vida! No quieres vivir con arrepentimientos. Recuerdo a mi padre predicando: “¡Si un cristiano se casa con un incrédulo, entonces el diablo se convertirá en su suegro!”

La persona con la que te casas debe ir en la misma dirección y compartir las mismas creencias que tú. Mientras Jamie y yo nos preparábamos para nuestra vida juntos, hablamos mucho sobre Dios y Su Palabra. Leímos la Biblia juntos, memorizamos las Escrituras y visitamos las iglesias de los demás. Dimos testimonio a los perdidos, asistimos juntos a conferencias y reuniones especiales. Si no puedes realizar actividades de iglesia, o congresos juntos, no estarás unidos en yugo igual. Dos bueyes deben ser del mismo tamaño y fuerza similares si van a caminar uno al lado del otro arando un campo. Un yugo desigual provocará frustración y llevará al agotamiento en cualquier relación. 

No se conforme con casarse con alguien que no va a ser un yugo igual en el área de la devoción. Ora por un cónyuge que te desafíe a ser más piadoso. 

* Todos los versículos de las Escrituras están tomados del RVR 1960 Biblia.

Copyright © 2020 por Knickerbocker Printing ISBN: 978-1-60208-482-7
Primera edición—2020 

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